La colaboración entre la Fundación Cobre Las Cruces (CLC) y el Centro Santa Ángela de la Cruz de la Asociación Española de Familias de Personas con Sordoceguera (Apascide) ha hecho posible la dotación de nuevos equipos informáticos adaptados de última generación para que sus usuarios “tengan a su alcance” todas las posibilidades que ofrece el mundo digital e internet.
Este centro es la primera y única residencia y centro de día que hay en España especializada en atender a jóvenes y adultos con sordoceguera. Se ubica en el municipio de Salteras (Sevilla) y uno de sus vecinos es, precisamente, el complejo minero-metalúrgico de Cobre Las Cruces, ha destacado la Fundación en una nota de prensa este lunes.
Cobre las Cruces ha ayudado a las personas con sordoceguera apoyando la labor que realiza Apascide. Como parte de la trayectoria de colaboración, la Fundación CLC ha renovado el taller de informática del centro, que estaba obsoleto. El Centro Santa Ángela de la Cruz fue inaugurado por Su Majestad la Reina doña Sofía del 26 de octubre de 2010 y, desde entonces, hace más de doce años, el taller de informática no había podido modernizarse por falta de fondos.
Uno de los objetivos del Centro Santa Ángela de la Cruz, y de Apascide en general, es facilitar a sus usuarios el acceso a la información, conectándoles a la realidad y al mundo que los rodea. “Sin ver, sin oír y, en muchas ocasiones, también sin hablar, la persona con sordoceguera queda completamente aislada si no cuenta con la ayuda de profesionales especializados (los mediadores en la comunicación) y las herramientas adecuadas”, ha subrayado la Fundación.
Por ello, el acceso a Internet es “imprescindible”. Los equipos donados por CLC permiten facilitar este acceso a las personas con sordoceguera del centro. Son herramientas de trabajo que se utilizan a diario. Gracias a esta donación, las personas con sordoceguera usuarias del Centro Santa Ángela de la Cruz cuentan con seis nuevos equipos de sobremesa completos de última generación con pantallas grandes, siendo una táctil, una línea braille y una tablet.
La donación de la Fundación CLC forma parte de las acciones de responsabilidad social corporativa que la compañía minera y metalúrgica desarrolla en los municipios de su entorno. “Apascide realiza un trabajo increíble y absolutamente imprescindible para apoyar a las personas con sordoceguera y a sus familias. Para nosotros es un honor poder poner nuestro granito de arena para mejorar sus vidas”, destaca el director general de CLC, Pedro Soler.
Las pantallas grandes donadas permiten aprovechar “al máximo” el resto visual de aquellos usuarios que lo tienen. La pantalla táctil (grande) es “fundamental” para aquellos usuarios que no pueden manejar un ratón ni ningún otro dispositivo análogo. La pantalla táctil ayuda a mejorar la motricidad fina en aquellos en los que no está muy desarrollada. Esta mejora no solo es algo que se quede en el uso de la propia pantalla táctil, sino que lo adquirido les beneficiará en su día a día, para coger un cepillo o un vaso, por ejemplo.
La línea braille “traduce” lo que se ve en pantalla al braille, lo que es “imprescindible” para aquellos usuarios que conocen dicho sistema de comunicación. Y, en general, unos equipos potentes permiten una experiencia rápida y fluida. Un sistema operativo actual (Windows 11) es mucho más fácil e intuitivo, cuenta con más configuraciones de accesibilidad, habiendo incluso algunas cuestiones en las que “ya no es necesario instalar un programa externo o drivers al estar ya integrado en el propio sistema”.
El Centro Santa Ángela de la Cruz ofrece a los jóvenes y adultos con sordoceguera múltiples oportunidades para desarrollarse plenamente como personas y para alcanzar el máximo nivel de autonomía del que son capaces. El mantenimiento de las instalaciones y el elevado número de profesionales para su correcta atención hace que el coste de cada plaza sea muy alto. Aportaciones como la de Cobre Las Cruces son “de vital importancia para Apascide y el centro”.